
Subarbusto suculento perenne endémico que puede formar matas de 3 metros de diámetro y más. Flores rosadas, blancas o amarillentas. Frutos amarillo-verdosos. Forma verdaderas carpetas de color que asombran por su belleza. Florece entre noviembre y diciembre.
Se lo encuentra desde Mendoza hasta Santa Cruz y prefiere lugares secos y expuestos. Es común verlo en cerros en sus laderas orientadas hacia el noreste para aprovechar al máximo la luz solar.